(ARA) – No se necesita mucho esfuerzo para que su vivienda funcione de forma más favorable al medioambiente. Incluso le sorprenderá cuánto dinero podría ahorrar.
“Un pequeño cambio puede marcar una gran diferencia”, afirma Charles Valinotti, vicepresidente principal de la aseguradora QBE. Recientemente, su compañía implementó una serie de pequeños cambios para proteger el medioambiente, y los ahorros siguen en aumento. “Son cambios que cualquier persona puede hacer en su propia casa. Sólo que nosotros los emprendimos a mayor escala”.
A continuación, cuatro sencillos cambios “verdes” inspirados en QBE que pudieran beneficiar a cualquier propietario de vivienda:
1. Reciclar – y no solamente los artículos obvios.
Es muy posible que esté reciclando frascos de cristal y latas de aluminio. Pero, ¿por qué limitarse solo a eso? Considere reciclar antes de desechar. Tal vez podría también recolectar latas de aluminio y llevarlas a la instalación de reciclaje más cercana en la cual podrían recompensarle en efectivo por sus esfuerzos.
La sucursal de QBE en Sun Prairie, Wisconsin, recicla cables eléctricos, gabinetes, estantes, metales y lámparas. En dos años, la compañía no solo recolectó reciclables no tradicionales por la suma de $4,000, sino que también evitó el costo adicional para desecharlos.
2. Cambiar a una iluminación de alta eficiencia.
Durante años hemos escuchado en todas partes que la iluminación de alta eficiencia es lo indicado. Pero ¿conocía la magnitud de diferencia que implica este cambio en sí? EnergyStar reporta que cada bombilla compacta de luz fluorescente puede ahorrar hasta $40 por concepto de costos de energía en su vida útil.
En marzo del 2010, la oficina de QBE en Bellevue, Washington, transformó la iluminación de su estacionamiento de lámparas halógenas a fluorescentes. Este cambio les ahorra 378,554 kilovatios/hora en uso de energía eléctrica, lo cual totaliza $26,575 en gastos anuales por utilidades.
3. Cuando no se use, apáguela.
Las madres de todo el mundo les recuerdan siempre a sus hijos: “¡Apaguen las luces, por favor!”. Aunque sin duda tiene sentido apagar las luces innecesarias, algunos podrían preguntarse si se debe apagar la computadora, pues se gasta más energía para echarla andar que dejándola encendida.
El Departamento de Energía de los Estados Unidos reporta que, para lograr ahorros de energía y conveniencia, debe apagar el monitor si no va a usar su computadora durante más de 20 minutos. Y apague la computadora si no va a usarla en las próximas dos horas.
Al igual que muchas personas, los empleados de QBE no siempre apagan sus computadoras al final del día laboral. El año pasado, la compañía inició desconexiones automáticas a las 9 p.m. hora local, lo cual equivale a ahorros por unos $55,000 en gastos de energía cada año. El sistema envía un aviso 60 minutos antes de la desconexión automática, para que hacer que sus computadoras sigan funcionando.
4. Papel – ¿a quién le hace falta?
Valinotti aconseja que tomar medidas modestas con vistas a una existencia sin papel puede ser natural e indoloro. Por ejemplo, numerosos dueños de viviendas realizan sus transacciones bancarias en Internet. De ser así, ¿qué utilidad tiene seguir recibiendo estados de cuenta impresos en papel? Numerosas compañías de utilidades y tarjetas de crédito también ofrecen pago de cuentas por Internet.
Al publicar una parte de sus reportes mensuales en Internet, QBE ahorra 2.5 resmas de papel y $11 por día, lo cual totalizó ahorros de $2,000 el año pasado.
Como habrá podido ver, unos cuantos cambios pequeños pueden ayudarle a ser más “verde” y a crear fortaleza financiera además.